Niños: acelgas y espinacas ¿Qué debo saber?
Los que tenéis niños pequeños habréis escuchado que los bebés no deben comer acelgas ni espinacas ¿verdad? Pero…
¿Qué ocurre con los niños más mayores?
¿Y por qué motivo no deben comerlas los bebés?
¿Qué debemos saber respecto a las verduras en los niños?
Cuando decimos que los niños (y los adultos) deben llevar una dieta rica en frutas y verduras debemos hilar más fino y hablar siempre de recomendaciones nutricionales en base a su edad.
Porque, aunque la mayoría de vosotros vea un puré de espinacas como una excelente opción desde el punto de vista nutricional y más ahora en pleno invierno en el que solo nos entran cosas calentitas, lo cierto es que las espinacas junto a las acelgas y la borraja son alimentos que no debemos ofrecer a niños menores de un año.
La Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición (AECOSAN) lo deja claro: estas verduras contienen nitratos en sus partes verdes.
Dichos nitratos son compuestos que se encuentran de forma natural en algunos alimentos. ¿Y si son naturales, por qué son dañinos?
El problema no es el nitrato en sí, el problema es el nitrito. Cuando el nitrato se convierte en nitrito es cuando resulta tóxico ya que compite con el oxígeno por fijarse a la hemoglobina y consumido en exceso en niños menores, puede provocar que la hemoglobina no sea capaz de trasportar oxígeno porque su lugar lo ha ocupado el nitrito.
Esto puede desembocar en una enfermedad grave que se llama metahemoglobinemia o síndrome de niño azul; niño azul porque debido a la baja oxigenación de los tejidos, los niños adquieren una coloración azulada motivo que nos hace saltar todas las alarmas.
¿En qué momento pueden comer acelgas, espinacas y borraja?
La ECOSAN acaba de actualizar sus recomendaciones en octubre de 2020:
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Espinacas y acelgas:
– NO DAR en niños menores de 1 año
– NO MÁS DE 45 gr al día en niños 1-3 años (guarnición)
– Si tiene una infección intestinal o gástrica: NO OFRECER.
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Borrajas:
No dar en niños menores de 3 años.
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Resto de verduras cocinadas:
– No mantener a temperatura ambiente ni enteras ni en puré, meterlas siempre en nevera.
– Conservar en la nevera si se van a tomar en el mismo día. De lo contrario, congelar.
– El lavado y la cocción de las verduras ayuda a reducir el contenido en nitratos.
La alimentación infantil es algo en lo que, los que nos dedicamos a la infancia, debemos estar permanentemente actualizados porque, os habréis dado cuenta los que tenéis más de un hijo, que esto no hace más que cambiar cada cierto tiempo. Por eso os recuerdo que en El Gran Libro de Lucía mi pediatra lo tenéis todo explicado y detallado.
Gracias y hasta pronto.
Os recuerdo que en El Gran Libro de Lucía mi pediatra tenéis una sección muy amplia sobre alimentación infantil desde el nacimiento hasta la adolescencia con todo lo que debemos conocer, actualizado y basado siempre en la evidencia científica de la que disponemos.
Dra. Lucía Galán Bertrand. Autora de:
- Cuentos de Lucía mi pediatra 2, 2020. Planeta”ªedición
- El gran Libro de Lucía mi pediatra, 2020. Planeta. 5ª edición
- Lo mejor de nuestras vidas, 2016. 16ª edición. Planeta.
- Eres una madre maravillosa, 2017. 9ª edición. Planeta.
- El viaje de tu vida, 2018. 3ª edición. Planeta.
- Los Cuentos de Lucía mi pediatra, 2019 (4ª edición)
- La agenda de mi bebé, 2ª edición, 2019. Planeta.
Etiqueta:acelgas, ALIMENTACION, espinacas