• Blog
  • Mis Libros
  • Mis Cursos
  • Vídeos
  • En los medios
  • Tienda
  • Contacto

Carrito

0
Lucía, mi pediatra
  • Blog
  • Mis Libros
  • Mis Cursos
  • Vídeos
  • En los medios
  • Tienda
  • Contacto

EMOCIONES

  • Inicio
  • Blog
  • EMOCIONES
  • ¿Tú regalas juguetes? Yo regalo emociones

¿Tú regalas juguetes? Yo regalo emociones

  • Escrito por Lucía Galán Bertrand
  • Categorías EMOCIONES

Cuando estábamos a punto de terminar la consulta, la madre le pregunta a su marido.

  • ¿Qué más? ¿Qué más? ¿Se nos queda algo en el tintero? ¿Tú no querías preguntarle lo de los juguetes?
  • ¿Juguetes?- pensé rápidamente.
  • ¡Ah sí! ¡Cierto! Los juguetes. Nuestra hija no puede tener más juguetes, pero es que además no solo no le entran en la habitación sino que además no les hace ni caso. Que se ha portado bien, un juguete; que vienen los abuelos, un juguete; que viene su tío, un juguete… ¡Estoy agobiado! ¡Algo estamos haciendo mal!

No nos damos cuenta pero premiamos continuamente a nuestros hijos con objetos materiales o con comida:

  • Si te portas bien en la consulta, te compraré el huevo kínder- escuché ayer mismo a una madre. Sus palabras me rechinaron tanto como cuando al profesor se le iba la tiza en el encerado y hacíamos todos “Sssssssss” tapándonos los oídos y apretando con fuerza la mandíbula.
  • ¿Te gusta el cochecito que tiene aquí Lucía? Venga, si no lloras, ahora mismo vamos a por uno.
  • Este fin de semana vienen los abuelos, si os portáis bien os comparé un regalo.
  • Papá y mamá se van de fin de semana, si sois buenos os traeremos muchos regalitos.
  • Si sacas buenas notas tendrás lo que pides.
  • Si te comes todo lo del plato, tendrás un premio.
  • Si te callas y dejas de llorar, te daré las galletas de chocolate.

O peor aún, en ocasiones he escuchado:

  • Cariño, anda, haz lo que te he pedido, no me hagas repetírtelo más veces.
  • Vale, mamá, pero ¿Qué me das a cambio?

¿Qué os parece? Vivimos en una sociedad consumista en la que ya no se reparan las cosas sino que simplemente se reemplazan, se compran otras nuevas. Nuestros hijos no valoran la cantidad de juguetes que tienen ni mucho menos el esfuerzo que supone comprarlos. Hace tiempo que me negué a hacer regalos porque sí a mis hijos, o al menos grandes regalos. He descubierto que con los pequeños “detallinos” que les traigo a los niños cada vez que viajo, he hecho de ellos unos fetichistas en potencia.

Ambos tienen una estantería con “recuerdinos”: un imán de un viaje a Barcelona que dice “Los besos, todo lo curan”, un pequeño troll de los deseos para hablar con él por las noches antes de acostarse, una bonita postal que les recuerde el precioso lugar que hemos visitado y al cual quizá no volveremos o un marcapáginas para que, cada vez que leamos un cuento, se acuerden de mí. Aunque lo que más me gusta es regalar experiencias.

  • Chicos, os habéis portado tan bien y mamá está tan contenta que os voy a regalar una tarde de cine juntos! – los niños dan botes de alegría, muchos más que si les hubiese regalado el último modelo de su juguete favorito con el que jugarán dos, a lo sumo 3 días antes de enterrarlo en el “baúl de los juguetes muertos”.
  • ¡Estoy tan orgullosa de ti por el esfuerzo que has hecho que hoy, tú y yo, nos vamos a comer  para celebrarlo!

Tenemos que premiar el esfuerzo más que los resultados, y premiarlo con tiempo juntos, tiempo del bueno, en exclusiva, de calidad.

  • Hoy has hecho todos los pipís en el baño, ¡como los niños grandes! Eso se merece una tarde juntos en el sofá viendo el último capítulo de la patrulla canina! ¿Vamos?

No hay mejor regalo para nuestros hijos que el tiempo.

Cambiemos el chip, cambia lo material por lo emocional. Hace unos días, mis hijos entraron en mi habitación una mañana de domingo. Intentaron ser todo lo silenciosos que pueden ser unos niños de su edad, que es poco, pero yo me hice la dormida. Cuando sus caritas estaban frente a la mía, cuando pude sentir su respiración sobre mí y sus risas contenidas,  entonces abrí los ojos:

  • ¡Qué sorpresa más bonita! ¡Los dos aquí! ¡Buenos días, chicos!
  • Buenos díassssss- gritaron los dos a la vez.
  • Hoy tenemos un regalo para ti- se adelantó mi hija, la portavoz de la familia.
  • ¿No me digas? – le dije abriendo los ojos de par en par mientras le apartaba un mechón de pelo de la frente.
  • Siiii- añadió mi hijo- ¡te hemos preparado el desayuno!

Regalas juguetes

Y efectivamente, habían puesto la mesa, con el mantel que a mí me gusta, habían cortado fruta, de aquella manera, pero lo habían hecho; habían tostado hasta el pan y habían intentado incluso hacerme un café en la cafetera aunque de café tenía poco (sospecho que se les olvidó la cápsula). No importaba, me supo a gloria.

  • Se están haciendo mayores- pensé con añoranza mientras saboreaba un café sin café y unas tostadas sin tostar.
  • Es que las sacamos enseguida mami, para que no se nos quemaran- intentó explicarse mi hija.
  • Son las mejores tostadas que he tomado en mi vida, cariño. ¡Gracias por este súper regalo!

Sus caras no podían reflejar más felicidad, más orgullo, más grandeza. Sí, se sentían grandes porque habían hecho algo grande.

Así que ya tengo por costumbre cada vez que salimos a comer decir: “venga, hoy salimos a comer, hoy invita mami”. Y realmente lo ven como un regalo y no como un derecho a salir a comer los fines de semana.

Desde aquí reivindico también los regalos emocionales con nuestras parejas: un fin de semana fuera de casa, una noche por ahí perdidos, una cena sorpresa, un bono canjeable por un buen “masaje casero” (que es gratis); un vuelo low cost a cualquier lugar, ya buscaremos más adelante el hotel, un minicurso de catas de vinos, lo que sea, pero que sea inolvidable.

Porque una olvida todos y cada uno de los regalos materiales que ha recibido durante sus cumpleaños, pero lo que no olvidamos son los momentos que nos han conmovido, que nos han hecho sentir y que nos han emocionado. Esos permanecen en nuestra memoria intactos, inquebrantables y ajenos al paso del tiempo. 

¡Feliz verano!

 

“Lo mejor de nuestras vidas” Editorial Planeta.Lo mejor de nuestras vidas 3

4ª edición. ¿Estás preparado para sentir, para emocionarte, para reír e incluso para llorar?

Ya a la venta:

  • La Casa del Libro
  • Amazon

 


Etiqueta:inteligencia emocional, regalos

  • Compartir:
author avatar
Lucía Galán Bertrand

Publicación anterior

Menú ¿Infantil?
17 Jul 2016

Siguiente publicación

Enfermedad del beso o Mononucleosis Infecciosa
31 Jul 2016

También te puede interesar

Límites y rabietas
Límites y rabietas ¡SOS!
31 marzo, 2021
educacion un viaje maravilloso
La educación, un viaje maravilloso – Entrevista con Gestionando Hijos.
2 marzo, 2021
Lucia mi pediatra como-ser-una-madre-maravillosa PODCAST
Podcast Lucía mi pediatra y el Club de Malasmadres
17 febrero, 2021

Deja una respuesta Cancelar la respuesta

Google


Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Buscador

Categorías

  • ADOLESCENCIA
  • ALIMENTACIÓN
  • CHUPETE
  • Covid-19
  • DE 0 A 12 MESES.
  • DE 2-3 AÑOS.
  • DERECHOS
  • DERMATOLOGÍA
  • DIGESTIVO
  • EMOCIONES
  • GENITALES
  • INFECCIONES
  • OFTALMOLOGÍA
  • REDES SOCIALES
  • RESPIRATORIO
  • SER PADRES
  • SUEÑO
  • TRAUMATOLOGÍA
  • VACUNAS

+ Leídos

Julia en la Onda
14Ene2019
A mi bebé le llora mucho un ojo ¿Tendrá el lacrimal obstruido?
21Oct2018
Mi hijo tiene tres pezones: politelia
13Abr2021
Bombardeo a un hospital de Médicos Sin Fronteras.
07Oct2015

Últimos posts

Mi hijo tiene tres pezones: politelia
13Abr2021
Límites y rabietas ¡SOS!
31Mar2021
¿Cereales integrales en niños? ¿Es saludable?
25Mar2021

©2020 Lucía, mi pediatra | Aviso Legal | Política de Cookies

Google

Inicie sesión con su cuenta de sitio

¿Perdiste tu contraseña?

¿No eres miembro todavía? Regístrate ahora

Registra una nueva cuenta

Google


¿Ya eres miembro? Inicia sesión

Utilizamos cookies propias y de terceros para obtener datos estadísticos de la navegación de nuestros usuarios y mejorar nuestros servicios. Si acepta o continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Puede cambiar la configuración u obtener más información aquí
Aceptar
Política de privacidad y cookies

Privacy Overview

This website uses cookies to improve your experience while you navigate through the website. Out of these cookies, the cookies that are categorized as necessary are stored on your browser as they are essential for the working of basic functionalities of the website. We also use third-party cookies that help us analyze and understand how you use this website. These cookies will be stored in your browser only with your consent. You also have the option to opt-out of these cookies. But opting out of some of these cookies may have an effect on your browsing experience.
Necessary
Siempre activado

Necessary cookies are absolutely essential for the website to function properly. This category only includes cookies that ensures basic functionalities and security features of the website. These cookies do not store any personal information.

Non-necessary

Any cookies that may not be particularly necessary for the website to function and is used specifically to collect user personal data via analytics, ads, other embedded contents are termed as non-necessary cookies. It is mandatory to procure user consent prior to running these cookies on your website.

GUARDAR Y ACEPTAR