¿Qué es? ¿Es contagioso? ¿Cómo se trata? ¿Puede ir al colegio?

El impétigo es una infección muy frecuente especialmente en niños. Aunque puede parecer alarmante al ver las lesiones, ¡no hay que entrar en pánico! En la mayoría de los casos, es tratable con cuidados adecuados y antibióticos.

🤔¿Qué lo causa?

El impétigo está provocado por bacterias que suelen estar en la superficie de nuestra piel, como el Streptococcus pyogenes y el Staphylococcus aureus

En condiciones normales, estas bacterias no causan ningún problema, sin embargo, si hay una pequeña herida, como una picadura de insecto, un arañazo o una rozadura, se abre una “puerta de entrada” para que estas bacterias penetren en la piel y causen una infección.

🔍¿Cómo es el impétigo?

El impétigo se manifiesta como una costra que adquiere un tono amarillento sobre una herida que inicialmente no parecía tener mayor importancia. A veces, en lugar de la costra, puede aparecer una ampolla llena de líquido. 

Las lesiones pueden presentarse en cualquier parte del cuerpo, siendo comunes alrededor de la nariz, la barbilla, los muslos, rodillas o glúteos.

Por lo general, el impétigo no suele causar fiebre, pero es común que los ganglios linfáticos cercanos a la zona afectada aumenten de tamaño debido a la respuesta inflamatoria del cuerpo ante la infección. 

Los ganglios funcionan como los guardianes de nuestro cuerpo, que se activan para combatir el agente extraño.

🚫¿Es contagioso?

Sí, el impétigo es muy contagioso y se transmite por contacto directo con las lesiones. Es frecuente que, cuando un niño es diagnosticado con impétigo, sus hermanos también lo desarrollen en pocos días.

💊Tratamiento

El tratamiento del impétigo depende de la extensión y la gravedad de las lesiones. 

Si el impétigo se detecta a tiempo, un tratamiento tópico suele ser suficiente, sin embargo, si la infección se ha extendido y las lesiones cubren varias partes del cuerpo, será necesario recurrir a antibióticos orales.

🏫¿Puede ir al colegio?

Tras 24 horas de haber iniciado el tratamiento antibiótico, el riesgo de contagio disminuye y el niño puede regresar al colegio si las lesiones están controladas.

En resumen, el impétigo es una infección cutánea común y molesta, pero fácilmente tratable si se detecta a tiempo. La buena higiene y el tratamiento adecuado son clave para una pronta recuperación.

 ¡No olvides lavarte las manos y mantener las heridas limpias para evitar que vuelva a ocurrir!

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¡Hasta la próxima!

Lucía Galán Bertrand | Pediatra y Escritora

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