Ayer me decía una mujer:
“Yo es que alucino con muchas personas que hacen auténticas barbaridades con sus hijos y nunca les pasa nada. Yo me preocupo por leer y estar bien informada y me tachan de exagerada, te tiquismiquis, de loca… A veces me siento tan sola. Lo único que quiero es hacerlo bien con mis hijos ¿tan difícil es de entender?”
La realidad es que Sí PASA.
Cuanta menos acceso a la información, cuánta menos educación y cuántos menos recursos, MÁS MORTALIDAD INFANTIL en todas las franjas de edad: enfermedades, accidentes, etc. Y esa es una realidad indiscutible.
Qué duda cabe que saber no te garantiza la salud y la seguridad de tus hijos, por supuesto que no.
¿Cuántas veces hemos sufrido un revés importante en la vida aún teniendo el conocimiento? Por supuesto que sí. Esto también forma parte de la vida. Desgraciadamente, hay muchas cosas que no están en nuestra mano.
Pero lo que sí tenemos que tener claro es que con educación, conocimiento y recursos el riesgo disminuye de forma importante: Cuánta más educación e información, mejor estado de salud de la población especialmente de los niños. Tened esto presente, por favor.
Así que me temo que aquello de “qué feliz se vive en la ignorancia” no es así.
Saber que ante un accidente de tráfico las lesiones medulares graves en los niños disminuyen un 80% si van en una silla a CONTRAMARCHA, aumenta la supervivencia de los niños.
No exponer a los niños menores de cinco años a frutos secos enteros o en trocitos aumenta su supervivencia.
Seguir el calendario vacunal y ponerles las vacunas que les corresponden aumenta de forma MUY importante su supervivencia.
Saber que los bebés en sus primeros meses de vida han de dormir BOCA ARRIBA aumenta su supervivencia.
No ofrecer azúcares ni ultraprocesados de forma regular a los niños aumenta su supervivencia y mejora su calidad de vida presente y futura.
Conocer que el sedentarismo en la infancia repercute en su futuro siendo un importante factor de riesgo cardiovascular en la edad adulta aumenta su supervivencia.
Saber que el consumo de alcohol en el embarazo es la principal causa prevenible de discapacidad intelectual entre otras patologías y trastornos, aumenta la supervivencia y la calidad de vida de esos niños.
Conocer que el consumo de bebidas energéticas en los niños y adolescentes aumenta el riesgo de tener arritmias cardiacas, trastornos de comportamiento y trastornos psiquiátricos aumenta su supervivencia y su calidad de vida.
Saber que los niños, niñas y adolescentes necesitan límites y conocer cómo establecerlos de una forma firme, respetuosa y con amor, mejora su calidad de vida y la del resto de la familia.
Y así cientos de ejemplos.
Así que no permitas que nadie te juzgue por leer, por informarte, por querer hacerlo lo mejor que puedas. No hay mayor responsabilidad en la vida que esta, cuidar y proteger a nuestros hijos.
Y no es cuestión de obsesionarse, ni de sobreprotegerlos; es simplemente cuestión de curiosidad hacia todo aquello que contribuye a que tú y tu familia llevéis una vida plena y feliz.
Así que la próxima vez que te llamen exagerada, o te reprochan que “lees demasiado” ten presente esto:
Eres la mejor madre o el mejor padre que ha podido tener tu hijo. ¡Y eso es grandioso!
Con todo mi cariño,
Lucía Galán Bertrand | Pediatra y Escritora
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Me tranquiliza leer estás cosas porque siempre se me ha tachado de exagerada,de cagueta,de estricta pero ahora se que lo hemos hecho bien tanto su padre como yo o al menos eso hemos intentado,gracias por el trabajo que haces Lucía.